Friday, September 21, 2012

Viernes de Bohemia y Algo Más.


Canción de galanes

Hace varios años y cuando era un pibe, recuerdo estar en casa de mi abuela en el corazón de Hato Rey. Bueno, para ese lugar lo era y aún lo es, por los recuerdos. Uno de mis tíos siempre tenía la costumbre de pasar a verla por las tardes y asi buscar a uno de mis primos. En lo que llegaba su esposa, siempre se iba a jugar un billarcito al comaldo de la esquina. Y en ese colmadito, estaban todos los de la barriada escuchando boleros y música del ayer. La tarde era una espectacular, calurosa y siempre era refrescante ver el sol cayendo en los edificios y cases de la metropolí boricua. Cuando llegaba al colmado con mis hermanos y primo, escuchabamos boleros o música como la de Raphael, José Luis Morenó, entre otros artistas.

Y ese tipo de música me trae esos recuerdos de aquella ciudad que necesitaba descansar del ajedreo del día y convertirse en la metropolí caribeña de "jangeo y sosiego" lleno de inseguridades. Y casi siempre era en los fines de semana que hacía eso. También, cuando escucho esa música, recuerdo los domingos en la tarde saliendo de la playa con mi madre y hermanos. Siempre sintonizaba la estación nacional de la salsa, Z93 y casi siemre salía salsa de la gothda, boleros y otro tipos de música. Para mí, era algo relajante, ya que ponia el "mood" para descansar para el lunes.

Otro recuerdo que tenía, era cuando viajaba con mis tíos por el Archipiélago. Siempre ponían Criolla 103. Los "old schoolers" como yo se recordarán de su famosa voz que decía la siguiente frase: "A La Gente que se le quiere, no se le grita. Criolla 103." Siempre daban boleros, baladas y otra músiquita de viejitos "atortola'os."  Era interesante el ambiente, porque uno andaba en alguna parte de la Isla, lejos de la metropolí, la música era un bálsamo para la mente ajorada de una persona de ciudad como yo. Además de que escucho Metal, Rock y generos pesados, pero, nunca me olvido de ese tipo de música. No era por ella, sino por los momentos que pasaba.

Ya que di una breve y nostalgíca explicación, pasemos a los viernes de bohemia cueril. A mi me gusta este tipo de música, pq me pongo sexy para las mujerotas que corren en algún chinchorro con exceso maquillaje para cubrir su belleza alcoholica. Me refiero, por cada cerveza, se ponen más atractiva. Uno se perfuma con Drakkar Noir, Old Spice o el mejor, Brut. Se pone una camisa de Los Kentons y prende el .8 para cueriar en el Archipiélago. Siempre poniendo alguna canción para atraer a las gaticas, como "Bella Señora, Condename a Tu Amor, Tu Cama Huele a Tí", etc. ¿Quién no ha hecho eso? Yo lo he hecho y siempre me llevo alguien enredá como FEMA. Después de cierta hora o unos cuantos palos; no escoge, sino recoge. Algo así como el ídolo de los padrotes, William Elías. Que utiliza hasta tarjetas de crédito del Banco Celestial. Lo más cercano que he escuchado sería el Banco del Vaticano y ellos están harto de dinero como de odio.

Uno tiene que ser macharrán para ser bohemio como Chicky Starr. Si, el Rey Indiscutible y Absoluto de La Lucha Libre le gusta la pendejá de la bohemia. ¿No me creen? Investiguen. Recuerdo ver a varias personas con las descripciones de los parrafos anteriores. Que andan tan y tan machotes, que tienen un ritual para atraer a los del sexo opuesto (y hasta chicas con mango de bate), cantan canciones de salsa clásica, boleros y hasta alguna otra canción de Sigi Casado.

Galán de Galanes, la hostia hecha en canción

Es increíble ver estos especimenes como se llevan a las mujeres y uno, que es un galanazo "fisno", se queda con el trago en la mano y una galleta en la cara.Tanto así, que le meten una "acribillá de embustes", que se los creen y van con ellas hacia detrás del "dumpster" a cuadrar "el baile horizontal" y esperar que no sean fichados por alguna otra persona envidiosa de la acción. Casi siempre, son personas de aspecto casi "austrolopiteco" y hasta de nativo, cuando usan prendas tamaños guani y manerismos dignas de tribu. Casi siempre hablan con el "ai" detrás o cambiando su expresión a un poco más de acuerdo con su intelecto y desarrollo de la intercomunicación hacia la persona opuesta y de su especie. Usualmente, ellos toman licor nativo y consideran la "brosa" como ambrosia para calmar sus animos después de cuponeo, vagancia o trabajo extremo en alguna construcción.

Ellos se mueven entre Santurce, Río Piedras y Hato Rey, lugares recónditos detrás de las montañas de cristal y cemento. En esta especie, se encuentran "cawfres", "oficinistas",  "ejecutivos" y hasta "estudiantes" merodean esos lugares donde la nieve blanca y síntentica brilla y bendice esas santas narices para que ellos reactiven su vida de fiesta en el cansacio cotidiano de vivir en una metropolí caribeña. Los he visto haciendo "karaoke" de canciones clásicas de los grandes como José José, El Puma, Roberto Carlos, Emmanuel, Byron y Michael Bolton. Aunque violen foneticamente y ritmicamente las canciones de los artistas, pero, sienten el poderíó varonil que reflejan esas canciones para atraer a todo tipo de persona y una persona sensual con la camisa de botones abierta a lo Mijares.  Es increíble ver a estas personas desamarrandose de su estatus social, apariencia y convirtiendose en otro más, gracias a la ambrosia de los "dioses" para cantar y modelar como los ídolos de la compilación de "Noche De Estrellas."


En fín, es bueno dejar atrás las apariencias y las pendejases de gallo bolo (frase de la barriada donde me crié) para disfrutar las noches de los fines de semana sin remordimiento alguno. Claro, hasta que llegue el lunes.